
Si extrapolamos a final de año los datos de IPC de agosto, en 2025 perderemos otro 0,65 %.
Este mes de septiembre cobraremos la paga lineal de 1.752 euros. Esta paga fue una reivindicación de todas las secciones sindicales de Endesa y se instauró en 2020 para todos, excepto la plantilla de V Convenio, como una compensación tras la firma del V Convenio. Si la paga de Septiembre es una compensación por la enorme pérdida -económica y de derechos- que supuso, no es revalorización. En el VI Convenio se ha mantenido esta paga lineal, incorporando al personal de V y VI Convenio.
La revalorización salarial no se mide por conceptos variables y no consolidables (paga Ebitda, paga de Septiembre), sino por la retribución fija, y esta nace de la fórmula de revalorización que se firma con cada convenio y afecta directamente al incremento de nuestra nómina mes a mes. Esta retribución fija sí es consolidable y se aplica tanto a los complementos retributivos, como, también, al sistema de Objetivos y las aportaciones al Plan de Pensiones.
En el VI Convenio, desde CCOO pedimos una revalorización en función al IPC, de forma análoga a como se hace con las pensiones en España. Con ella, garantizaríamos que nuestro poder adquisitivo se incrementaría en la misma medida que el coste de la vida. A este incremento en base al IPC, desde CCOO proponíamos sumarle una variable, negociable con la dirección, ligada a la productividad de la plantilla.
La dirección lo rechazó. Y, en cambio, mantuvieron la fórmula existente para aquellos que en Endesa tenían un salario menor (IPC subyacente + IPC) / 2 > 1,5 %. Volvemos a instar a la dirección a que sustituya el 1,5 % por el 1 %, ya que, aunque ligeramente, mejoraría la ecuación a favor de la plantilla.
CONSECUENCIAS
El resultado de esta fórmula aprobada en el VI Convenio fue un incremento de nuestra retribución del 2,15% en 2024. Dado que el IPC subió en 2004 un 2,8%, perdimos un 0,65%.
Si se hubiera aplicado la fórmula propuesta por CCOO Endesa para el VI Convenio, el incremento de nuestra retribución en 2004 hubiera sido del 2,8% más la variable por la productividad.
Pues bien, con los datos de inflación de agosto de 2025 (2,7%), si el dato se mantiene de aquí a final de año, perderíamos otro 0,65% en 2025. La consecuencia sería que, en dos años, habremos perdido un 1,3% de poder adquisitivo.
Por ello, no entendemos que nos pidan vídeos ni fotos de nuestro verano. Dennos una subida salarial digna, acorde, como mínimo, a lo que los precios aumentan cada año.