Esta semana se celebró la que muy probablemente será la penúltima reunión de la Comisión Negociadora del Convenio Marco. Y como las últimas desde el pacto de octubre entre la Ugt y la dirección, nada más que fue un trámite para cumplir con el expediente negociador. En este caso, trataba de los capítulos VIII en adelante del convenio y CCOO presentó sus propuestas de mejora, aún a sabiendas de que el texto final está decidido.

En esta entrada accedes al documento que hemos presentado a la mesa.

Lamentamos la deriva que han tomado los acontecimientos, con dos secciones sindicales compartiendo el análisis de lo ocurrido en Endesa, y una que, lejos de aceptar la realidad de los hechos, es decir, haberse levantado de forma unilateral de unas movilizaciones en unidad sindical que estaban ejerciendo una creciente presión sobre la dirección, ha pactado este arbitraje que deja el modelo de relaciones laborales de Endesa a los pies de los caballos.

Entendemos que moleste que los trabajadores históricos de nuestra empresa exhiban pancartas en las que se lee “Unión General de Traidores”, pero cada uno debe asumir la responsabilidad y consecuencias de sus actos. En este caso, además, hemos tenido que lidiar con algo insólito y especialmente insultante: que desde la parte social la negociación la lidere alguien con una nula experiencia laboral en nuestra empresa. En esta anomalía también puede estar la explicación de lo sucedido.

Pensamos que la plantilla debe entender que no podemos permitirnos ni un minuto más una correlación de secciones sindicales en Endesa en la que una puede hacer y deshacer a su antojo, mintiendo a las demás y utilizando su trabajo como lo estime conveniente para sus intereses.

Es cuestión de dignidad. Una vez que tengamos el texto del convenio en la mano desde CCOO lo valoraremos. En este caso llevamos desventaja las demás secciones sindicales respecto a la Ugt, pues los que iban a “echar a los italianos” resulta que ya conocen perfectamente el contenido del mismo.